Hace dos años y dos meses que Hafsatou llegó a España. Tiene 22 años y el cabello peinado con trenzas finas que cubren toda su cabeza. De Dakar, en Senegal, mientras habla le brillan los ojos. Cada martes y jueves por la mañana aprende español en el curso que imparten nuestros profesores y profesoras voluntarios en Málaga.
«Vivo con mi hermana, su marido y sus hijos», explica hilvanando despacio las palabras. Vino sola de Senegal para ayudar a su hermana Aminatou que ya residía en España y que tiene un hijo enfermo del riñón, que debe ir hospital frecuentemente. «Como yo estoy aquí, mi hermana puede trabajar», aclara. Hafsatou cuida bien de sus sobrinos de 12, 10 y 7 años. Les lleva al colegio y también a otras actividades como fútbol.
Camiseta verde luminosa, varios aretes dorados en sus orejas, cuenta que en Dakar empezó a estudiar idiomas en la Universidad y que tiene su diploma. «Me gustaría ser profesora de idiomas», afirma. Sabe francés y un poco de inglés pero aún no ha logrado regularizar su situación para poder tener un empleo, que es lo que le gustaría. «Como no tengo papeles , no puedo trabajar», se lamenta.
Comentamos la situación difícil que se está viviendo en Senegal, crisis política, protestas y represión que están obligando a muchos compatriotas a dejar sus hogares y arriesgar su vida en el mar para llegar a España. Ella tiene allí a su familia, a la que añora. «Echo de menos a mi madre, a mi padre, a mi hermano, a toda la familia». Habla con ellos «siempre» y le preguntan que cuándo va a ir a verles, aunque no puede hasta que regularice su situación.
Sobre las clases de español que comenzó en octubre, piensa que están «muy bien» y le gustan mucho, también se refiere con cariño a María, su profesora. Su hermana Aminatou fue también alumna del curso de castellano hace algunos años. Haftasou dice que el español no le resulta muy difícil, pero coincide con Tamara, una de sus compañeras de clase en que los verbos irregulares son de las cosas que le cuestan más trabajo.
Si piensa en el futuro se imagina trabajando y formando una familia en España. Activa, curiosa, emprendedora, le gusta viajar, escuchar música francesa y española y leer. «He estado en Madrid y conozco Barcelona, Granada, y Almería», apunta, y agrega que está leyendo un libro sobre traducción.
Añade que también le gustan las clases porque tiene la oportunidad de conocer a otras personas. Dice que no tiene muchas amistades porque aún no habla de todo bien, sino sólo «un poquito». Aunque sí con una amiga que vive en su calle y a la que peina siempre con trenzas. Le digo que sí que entiende y se maneja hablando español como ha demostrado durante la entrevista y sonríe con timidez antes de regresar a clase a seguir aprendiendo.