Por Karin O. Silva*
María Fernández Sampedro es una profesora de primaria jubilada que colabora con Málaga Acoge desde hace un año, dando clases de español a los usuarios de diferentes nacionalidades para ayudar a su integración en la sociedad malagueña.
¿Cómo conociste Málaga Acoge? Conocí a la ONG a través de mi amigo Dimas, que fue voluntario el curso anterior en Torre del Mar y me interesé por que yo estaba buscando hacer algo con mi tiempo libre y quería sentirme útil. Pero me venía mejor ser voluntaria en Málaga, fui a la sede y me encontré con Carmen Espeja, que es la coordinadora del programa. Nosotras trabajamos juntas en un colegio hace muchos años, así que no tuve problemas para conseguir integrarme en el equipo de voluntariado. Yo soy voluntaria en la sede de Calle Bustamante desde hace un año.
No es lo mismo ser profesora de Primaria a dar clases de español… Es muy diferente porque se trabaja con adultos, que además tienen una situación muy particular y no tiene nada que ver con el trabajo que hacía cuando era profesora de Primaria. Aunque es verdad que yo echo mano de muchos recursos que tengo de la escuela. Doy clases los martes y los jueves.
¿A los adultos se les puede enseñar también como jugando? Sí, pero no de manera infantil. Se hacen actividades entretenidas, que les motiven y que sean lúdicas. Yo llevo la tablet y les pongo canciones, también algún juego para conocernos y que sepan cómo presentarse.
¿Cuántos alumnos tienes? Ahora mismo tengo diez alumnos de diferentes nacionalidades como Ucrania, Marruecos, Brasil y Sáhara. Son más mujeres que hombres. Aunque en este proyecto hay alumnos que van y vienen por diversas circunstancias. Todos mis alumnos tienen muchas ganas de aprender porque para ellos el idioma es básico y necesitan comunicarse para poder integrarse. Aprender el idioma para ellos es fundamental para el día a día como ir a hacer la comprar, coger el autobús, etc. Muchas madres me preguntan cosas para poder hablar en el colegio, para saber si los niños tienen algún problema de adaptación, etc.
También nos faltan profesores que quieren ser voluntarios para seguir con este programa tan importante para la integración de las personas.
¿Cuál es el balance de este trabajo de voluntaria que realizas? Personalmente me siento muy satisfecha, para mí los martes y los jueves que voy a dar clases son días bonitos porque para alguien como yo que le gusta la enseñanza encontrarse con gente que quiere aprender es lo mejor que le puede pasar a un docente. Luego es una relación muy bonita con los alumnos porque te cogen como referente y somos un nexo importante para la integración. Luego a nivel de los compañeros también me siento muy contenta porque es un equipo que te apoya. Cuando yo empecé me ayudaron mucho porque yo no había trabajado con adultos. Estoy muy agradecida con Málaga Acoge por la experiencia de poder ayudar y sentirme útil. Me gusta mucho la docencia y aunque estoy jubilada, gracias a este trabajo de voluntaria puede seguir haciendo lo que más me gusta.
¿Cómo ves el trabajo de Málaga Acoge? Me parece una labor loable. Yo he visto casos de chavales que han estado viviendo en la calle y la ONG los ha apoyado, familias que necesitan ayuda, en fin, muchos casos y mucha gente que recibe ayuda y apoyo por parte de Málaga Acoge. Considero que falta dar más visibilidad al trabajo que se hace en la ONG para que la sociedad vea la importancia del trabajo que se hace para integrar a los inmigrantes que llegan a España. Falta también un poco de empatía e intentar ponerse en el lugar de las personas que llegan a nuestro país, cada ser humano tiene un caso y una situación especial.
¿Algo más que agregar? Falta un poco más de ayuda para los cursos. Los profesores llevamos nuestro propio material porque en Málaga Acoge hay pocos recursos. También nos faltan profesores que quieren ser voluntarios para seguir con este programa tan importante para la integración de las personas. Estoy segura que si tenemos más visibilidad, otros docentes conocerían este trabajo de voluntario y vendrían a apoyar el programa.
*Texto y fotos de Karin O. Silva, voluntaria de Comunicación de Málaga Acoge.
Si quieres formar parte de
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