Nuestra voluntaria Cecilia Calle estuvo hablando con Irene Garrido, que también forma parte de nuestro voluntariado en el equipo de Educación de la asociación en Málaga. ¡No te pierdas su interesante entrevista!:
Por Cecilia Calle
Así comienzo mi entrevista con Irene Garrido Aranda, voluntaria en el programa de educación en Málaga Acoge desde hace dos años. Nos encontramos en el colegio San José de Calasanz, en Málaga, donde viene dos veces por semana a ayudar a niños con sus deberes. Bueno, dos veces oficialmente: “nos ha ayudado muchísimo. Oficialmente sus días son los lunes y los jueves, pero en realidad está siempre aquí. […] Desde que una de nosotras ha tenido que irse por otros compromisos, Irene ha retomado las clases y ha sido un apoyo increíble”. Así lo cuenta Amparo, coordinadora del programa de Educación, dando fe de la voluntad de servicio, positivismo y entrega hacia la educación de los niños por parte la voluntaria.
El interés de Irene por el voluntariado en el ámbito de la educación comienza hace ya muchos años. De más joven, hasta pensó en volverse educadora, pero siguiendo los consejos de su padre -profesor de instituto- decidieron que una vía en economía y empresas sería más adecuado para sus estudios profesionales. “Después lo hemos hablado, y los dos estamos de acuerdo en que fue un error no haber estudiado para ser profesora. Es lo que de verdad me apasiona”, comenta.
Sin embargo, Irene ha encontrado a través del voluntariado una manera de canalizar su interés por el trabajo en educación infantil. Originalmente de Almería, comenzó su experiencia como voluntaria en el ayuntamiento de Roquetas de Mar, donde crea el Área de Educación y trabaja como voluntaria de 2012 a 2016. La responsabilidad de llevar el proyecto personalmente confirma su pasión por la educación.
Desde entonces, Irene ha ejercido como voluntaria en educación con Málaga Acoge bajo la recomendación de un familiar que también contribuye como voluntario para la asociación.
Lo que más le agrada es la satisfacción que le trae ayudar a los niños, así como pasar tiempo haciendo lo que verdaderamente le gusta y que hubiese hasta podido convertirse su carrera. Pero esto, como es de esperarse, viene con sus dificultades: “el control del aula a veces puede ser complicado. […] No tener la formación de técnico en Educación tiene sus límites y , a veces, no son todos del mismo instituto así que los deberes pueden ser diferentes”.
Estas dificultades las compensa con su entusiasmo por la actividad, que me comenta considera una unión perfecta “¿es casi egoísta no? […] Lo hago porque verdaderamente lo disfruto y al mismo tiempo, a través de mi tiempo aquí, puedo ayudar a otros”.
Afirma que el trabajo con los niños puede ser muy divertido porque conservan la candidez que se pierde al crecer: “¡un chico una vez me preguntó por qué me visto de turista! No sé por qué le ha dado esa impresión”. Son los comentarios tiernos, divertidos y que construyen relación, propios de la edad y la inocencia que hacen la experiencia del voluntariado tan grata a Irene.
A través de su apoyo a Málaga Acoge, esta voluntaria logra conjugar su interés personal con la colaboración hacia los mas pequeños que necesitan un empujón. Irene es un ejemplo de una relación donde todos ganan y se nutren unos de otros.
El refuerzo educativo a los niños y niñas se enmarca en el programa CaixaProinfancia de la Obra Social “la Caixa” que busca favorecer el desarrollo de las competencias de los niños, niñas y adolescentes y sus familias para favorecer su integración social y autonomía. Promueve el desarrollo social y educativo de la infancia y adolescencia en su contexto familiar, escolar y social. También contribuye a sensibilizar y movilizar a la sociedad en la erradicación de la pobreza infantil.
