¿Cómo valora el trabajo desarrollado en el último año por Málaga Acoge?
Tanto en las dos sedes de Málaga capital como en los diferentes municipios donde estamos presentes: Antequera, Vélez-Málaga y Fuengirola, en todas estas sedes hay iniciativas y proyectos muy interesantes. Técnicos y voluntarios están trabajando bien. Aunque está claro que es difícil llegar a toda la población de las localidades en las que estamos: Llegamos a gran parte, pero es imposible llegar a todo de una forma completa, entendiendo que siempre se hace lo máximo posible. En Educación se trabaja mucho tanto tema de menores, formación… o proyectos como el de mediación cultural en colegios que desarrollamos en la sede de la Axarquía. Prisiones, Jurídico, Social… También hemos apostado por mejorar la comunicación de la entidad, que se conozca cada vez más; y, además, en los últimos meses se ha dado un impulso muy significativo al área Laboral, algo de gran importancia.
Son muchos campos de trabajo…
Es cierto que queremos abarcar muchas cosas. Y en las reuniones de la junta hay muchas ideas, propuestas, iniciativas que siempre se quieren poner en marcha. Sin embargo, a veces lo urgente se interpone ante estas cuestiones. El Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), los usuarios con problemas que nos necesitan con rapidez… Son cosas que hacen que la propia asociación tenga dificultades de crecer en ciertos sentidos. El día a día nos supera en muchas ocasiones. Y cada vez más hay problemas de trabajo, vivienda, renovación de documentos…
La crisis nos afecta a todos, ¿no?
La verdad es que vienen muchas personas inmigrantes a intentar buscar un trabajo, aunque también quieren formarse, porque eso les ayudará a poder trabajar; el tema formativo es, además, algo muy importante para nosotros y que se trabaja mucho en el Departamento de Laboral de la entidad. Pero el problema de los inmigrantes es muy serio. Hay muchísimos que están en paro. Trabajo que hacían ellos antes ahora lo hacen los autóctonos. Hay muchos que vuelven a sus países, pero en Málaga son los menos. Así que aspectos como la formación o la intermediación laboral ayudan mucho tanto a las personas que tienen papeles como a los que no poseen documentos. Las administraciones no aceptan algunas veces a las personas indocumentadas, pero nosotros trabajamos con ellos, no es un factor para nosotros que tengan o no documentación. Nos importan las personas. Y el tema laboral lleva al problema con la documentación, a la vivienda… así que todas nuestras áreas están plenamente coordinadas para intentar mejorar la situación en la medida de lo posible y que se vea alguna luz al final del camino.
¿Es importante para Málaga Acoge el trabajo con personas no documentadas?
Málaga Acoge debe trabajar tanto con documentados como no documentados, sin hacer excepciones. Uno de los objetivos de la entidad es trabajar con personas excluidas, y hay poca exclusión mayor que no tener documentación: No tienen nada. Y Málaga Acoge debe estar ahí, atenderles y luchar porque ellos puedan tener su documentación y adquieran su ciudadanía plena en Málaga. Uno de los principales objetivos debe ser ese: Que todo el mundo tenga su propia documentación, que sea ciudadano como todos. Es complicado, y la administración pone cada vez más trabas, pero hay que trabajar por ello. La reivindicación debe ser uno de nuestros pilares, como siempre lo ha sido, por ejemplo, el CIE.
¿Cómo ha visto la irrupción del 15M en las denuncias contra el CIE de Capuchinos?
El CIE siempre ha sido un tema fundamental en Málaga Acoge. Siempre es un aspecto que hemos denunciado, llevamos años luchando por su cierre. Y si no podemos cerrarlo, al menos para denunciar los atropellos que se han venido produciendo allí. Junto a la Plataforma, hemos publicado dos libros respecto a la situación del CIE de Capuchinos [uno de ellos se puede leer y descargar aquí], se han realizado varias visitas al CIE, y Málaga Acoge ha tenido un papel fundamental en dar a conocer la situación de allí dentro con nuestro equipo jurídico, social… Como también lo tienen entidades como Médicos del Mundo. Y también formamos parte de la plataforma: Que el derecho no se detenga en la puerta de los CIEs. Eso sí, con todo lo relativo al CIE hay que tener mucho cuidado. En ocasiones puede haber interferencias que pueden perjudicar más que ayudar al trabajo que se viene haciendo desde hace tanto tiempo; es un tema complejo. Aunque las iniciativas que han llevado a cabo desde el movimiento 15M nos parecen positivas: Todo lo que sea denunciar la situación del CIE, dar a conocer lo que allí ocurre, que se haga público… es muy importante.
¿Tan mala es la situación del CIE malagueño?
La situación del CIE es tremenda, lamentable. Pero es que todos los CIE están igual: Algeciras, Madrid… Es peor que una cárcel, los familiares tienen problemas para ver a los internos, las instalaciones están muy mal… Están hasta 60 días allí internados en condiciones inhumanas: Hasta los propios policías denuncian la situación del CIE. Eso algo quiere decir.
¿Veremos alguna vez el cierre de los CIE?
Yo no lo veré, estoy casi segura. Puede que se cierre dentro de muchos años, pero es muy complicado. Las administraciones nunca han estado por el cierre de los centros de internamiento. Y aquí cuando se habla de cerrar uno es porque se pretende abrir otro, aunque el proyecto está parado. Y el reglamento que se estaba elaborando para el funcionamiento de los CIE también está parado, aunque fíjate que es un documento que se elaboró por parte de la administración sin tener en cuenta a las entidades que tanto trabajamos en este tema.
¿Qué valoración hace del nuevo Reglamento de Extranjería?
Nosotros consideramos que un Reglamento debe ser un instrumento para facilitar la integración del inmigrante, que no ponga trabas, que permita una igualdad de derechos, libertades… pero no lo es. Lo único que interesa es la versión utilitarista: Que tenga trabajo. No interesa la persona, sus características, derechos, libertades… Eso no interesa nada de nada. Y por eso nuestra valoración del nuevo Reglamento de Extranjería es muy negativa. Además, se ha hecho sin contar para nada con las asociaciones que trabajamos con las personas inmigrantes.