La población andaluza, en general, acepta y valora a la inmigración cuya imagen mejora notablemente respecto a años anteriores y al periodo agudo de crisis. Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado el estudio Opiniones y Actitudes de la población andaluza ante la inmigración, que acaba de presentarse públicamente.
A pesar de los importantes avances, siguen existiendo falsos rumores en la ciudadanía, en relación al uso que las personas inmigrantes hacen de los servicios públicos. Preguntamos a los investigadores Anabel Suso (coordinadora técnica del estudio), Héctor Cebolla (sociólogo e investigador experto en inmigración) y José Antonio Oleaga (investigador del Observatorio Vasco de la Inmigración) sobre estos y otros asuntos que puedes ver en el siguiente vídeo:
Sobre todo, llama la atención la alusión al acaparamiento por parte de personas inmigrantes de ayudas públicas. El rumor “aunque tengan los mismos ingresos, se les da más ayudas a la población inmigrante que a la española” presenta un 46,10% de opiniones a favor, frente a 42,34% de quienes manifiestan su desacuerdo; siendo esta proporción casi el doble de la expresada en anteriores ediciones del estudio. También llama la atención el alto grado de acuerdo expresado respecto a la afirmación de que “las personas inmigrantes abusan de la atención sanitaria” (el 49,8% del total está de acuerdo o muy de acuerdo con esta afirmación, frente a un 39,8% que no estaría de acuerdo). En 2015,el 21% de la población pensaba que el Estado ofrece mucha y/o bastante protección a la población inmigrante en 2017 es el 44%.
El escenario internacional ha contribuido a incrementar la latente islamofobia, que sólo puntualmente provoca delitos de odio en la sociedad andaluza pero estigmatiza sobre todo al colectivo magrebí.
Según el estudio, a excepción del avance de estos rumores, la percepción general de la ciudadanía ante la inmigración mejora, aunque mediante una visión utilitarista. Se opta mayoritariamente por un modelo de integración asimilacionista que presiona a la población inmigrante para que renuncie a aquellas costumbres y elementos de la cultura que «incomodan» al común. Por otro lado, también se reconocen los derechos sociales y políticos siempre y cuando esté garantizada la situación de regularidad de la estancia en nuestro país.
Esta información se inscribe en el Proyecto Stop Rumores en Málaga, participación ciudadana para promover la convivencia , una iniciativa de Málaga Acoge que cuenta con el apoyo de la Diputación de Málaga. Este proyecto se incardina en la estrategia de lucha contra los rumores promovida por la Agencia Stop Rumores en www.stoprumores.com.
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