Ouassima da clases de español desde septiembre en nuestra sede de Fuengirola. Cada martes y jueves comparte las mañanas durante una hora y media con un grupo formado en su mayor parte por mujeres marroquíes. Nació en Tetuán, pero lleva toda su vida en España. Cuenta que su madre fue una de las primeras alumnas que aprendió español en Málaga Acoge en los inicios de la asociación hace más de treinta años.
«Ellas aprenden español, pero yo aprendo mucho más de ellas», dice convencida Oussaima. Reconoce que nunca había dado clases antes de comenzar este voluntariado y que le «está gustando mucho» y lo está «disfrutando un montón». De una familia de cinco hermanos y madre de una niña de tres años siente satisfacción al poder apoyar a otras personas. » Cosas que a mí me parecen insignificantes, escribir, leer, ves que hay gente a las que les cuesta, que no lo entienden, y yo les puedo explicar», argumenta.
Para que comprendan mejor, Oussaima les traduce a veces al árabe, al francés y al inglés durante las clases. En la del jueves, dos alumnas practican un diálogo en una pastelería: -Buenos días, señora, ¿qué desea?, pregunta la que hace de empleada. -Buenos días, me da una barra de pan y un pan integral, responde la clienta. Hoy han venido cinco mujeres marroquíes y un chico de Senegal. En la pizarra están escritas las cinco vocales -«El a, e , i ,o , u se lo tienen que aprender sí o sí»- para orientar en la pronunciación de las palabras y dos filas encabezadas con los títulos frutas y verduras.

-Osman, ¿sabes lo que son los guisantes?, le pregunta Oussaima, y se acerca a su silla para enseñarle una foto en su móvil. Reparte un folio con los nombres de frutas y verduras, y otro con distintos objetos cuyo nombre los alumnos y alumnas leen en voz alta. «Esto es una botella, esto es una caja, esto es un balde…». En las clases, apunta, les habla siempre de cosas cotidianas e insiste en la pronunciación. Cuenta que a alguna alumna que sabe leer, pero que le cuesta escribir, le hace copias para que practique caligrafía en casa y después se las corrige en clase.
Tú también puedes apoyar a las personas más vulnerables colaborando con los proyectos de Málaga Acoge AQUÍ
Oussaima no había dado clase de español hasta que ahora, pero sí venía colaborando con Málaga Acoge haciendo de traductora con personas que apoyamos. Además, asegura que ahora anima a mucha gente que conoce a sumarse al equipo de voluntariado.
Aparte de Ouassima también dan clase de español en Fuengirola otros tres profesores, como Hanae, Rafael, Jose por las tardes y Miguel online. Málaga Acoge imparte clases de español también en las sedes de Málaga, Torre del Mar y Antequera.