Actualizado hace 10 años – Publicado el 2 de mayo de 2012
Pasamos una mañana junto al personal del Departamento de Prisiones de Málaga Acoge en una de sus visita a la cárcel de Alhaurín de la Torre, donde realizan un interesantísimo trabajo.
Son las 11 de la mañana y Carmen Cano recoge de un casillero con el cartel ‘ONGs y voluntarios’ varias instancias. Los documentos son prácticamente la única forma de los internos de solicitar una reunión con ella. Y, aunque hace sólo una semana que pasó por la prisión de Alhaurín de la Torre, la técnica del Departamento de Prisiones de Málaga Acoge tiene 14 instancias. Luego, mientras se dirigen al módulo 9, donde hoy tiene ya varias citas programadas, Juncal Benavides, trabajadora social en prácticas que le acompaña esta mañana, lee los nombres de quienes han firmado las instancias : Conoce los casos de prácticamente todos. “La mayoría son de personas con los que ya tenemos procesos abiertos, pero hay gente nueva también”, asegura.
Precisamente, la primera cita del día en el módulo 9 es con alguien al que no conoce, así que Carmen y Juncal escuchan atentamente su caso para, después, informar de qué pueden hacer por él. Igual ocurre con el siguiente, esta vez un viejo conocido, al que van a ayudar con su permiso de residencia: Se ha gestionado la renovación desde prisión y ha salido a comisaría a poner la huella, y ahora necesita recoger la tarjera definitiva, pero no puede. “Este tipo de casos es muy habitual. La mayor parte de gente que piden vernos es para temas relacionados con sus permisos, la renovación de pasaportes, trámites en comisaría…”, asegura Carmen. En otras ocasiones, simplemente necesitan contactar con su abogado, “porque muchas veces no saben ni quién es”. “La inmensa mayoría de los abogados de oficio tramitan bien los temas de los internos, pero éstos muchas ocasiones no saben quiénes son por que no los visitan para mantenerlos informados”, cuenta la trabajadora social. Mientras lo atiende, otros internos esperan al final de la sala su turno para exponer su problema o conocer cuáles son los recursos con los que Málaga Acoge puede ayudarles. Una labor en la que cada vez más ayuda Juncal, que asegurar estar aprendiendo mucho durante sus prácticas en la entidad: “Esta es la mejor forma de aprender todo lo relativo a Extranjería. Te pones al día de todo y comprendes mucho mejor por qué ocurren ciertas cosas”, cuenta la futura trabajadora social.
La labor de Carmen se coordina en numerosas ocasiones con los trabajadores sociales del propio recinto penitenciario. De hecho, antes de entrar a los módulos, la responsable de Málaga Acoge ha pasado ya por la oficina donde se encuentran todos para ponerse al día mutuamente. “Ellas me ayudan muchas veces, pero también nosotros echamos una mano con muchos internos, ya que todos los temas de Extranjería no son precisamente fáciles”, cuenta Carmen. De hecho, al entrar al despacho de los trabajadores sociales de la prisión recibe un aluvión de peticiones de gestiones y consultas además continuar la gestión de algunos casos de coordinadamente, “aquí podría pasar el día entero porque hay muchas cosas que hacer, pero es muy importante ir a ver a los internos”, destaca. En Alhaurín hay una población de unos 400 presos extranjeros y muchos de ellos no tienen recursos, apenas conocen el sistema penitenciario español o ni siquiera saben hablar castellano, así que hay mucho en lo que ayudar. De hecho, su tarea de sensibilización es muy importante allí: “no todo el personal que trabaja en el ámbito penitenciario es consciente de la dificultad que supone para una persona extranjera estar en prisión lejos de su país de origen sin contacto con su familia”, subraya la técnica de Málaga Acoge.
El trabajo presencial en la prisión de Alhaurín de la Torre, donde Carmen acude una vez en semana, es apenas la punta del iceberg de su labor. Después, en el día a día, toca llevar a cabo –junto a su equipo de voluntarios- una ingente cantidad de tareas: trámites, acompañamientos, seguimientos de las gestiones, contactar con abogados, recoger documentos en comisaría… Y también organizar diferentes talleres, actividades y charlas tanto en Alhaurín como en el Centro de Inserción Social “Evaristo Martín Nieto” de la capital malagueña. Sólo en 2011 este departamento realizó unas 800 gestiones y trabajó con cerca de 300 reclusos.
Cualquier persona interesada en echar una mano en el Departamento de Prisiones de Málaga Acoge puede hacerlo como voluntario o voluntaria escribiendo a voluntariado.malaga@acoge.org. Igualmente, se pueden realizar aportaciones económicas al proyecto a través de la web http://www.migranodearena.org/CARMENCANO2