Actualizado hace 2 años – Publicado el 24 de septiembre de 2021
Doce personas, de 21 que se formaron en Málaga Acoge a través de un curso del programa Punto Formativo del programa Incorpora, están trabajando como operarios de producción en Ahumados Ubago, la planta de Málaga de Ubago Group Mare en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). Y se espera que en los próximos días se puedan incorporar más a esta planta del grupo, especializado en conservas de pescado, ahumados y salazones, que lleva en la médula la responsabilidad social corporativa.
La colaboración de Málaga Acoge con Ubago comienza a finales de 2019 y supone una «oportunidad de oro» para la asociación, destaca la coordinadora del Área de Empleo, María Domínguez. Es la primera vez que Málaga Acoge tiene abiertas las puertas de una empresa tan grande.
Aprovechamos una reunión en Málaga del grupo Ubago, con fábricas en España y Marruecos y Cabo Verde, para hablar con Antonio García, psicólogo, director de Recursos Humanos del grupo y profesor en la Universidad de Cádiz.
García valora la aportación de Málaga Acoge en esta colaboración ya que «primero, selecciona y segundo, imparte formación en competencias transversales, una formación específica que hace que las personas que optan a los trabajos llegan más preparadas».
En la parte teórica del Punto Formativo, aparte de trabajar las competencias transversales, también se incluyó en el temario información específica sobre Ubago. Además, los cursos prevén quince días de prácticas en la empresa, que sirven para tener un contacto directo con el puesto de trabajo.
Responsabilidad social
El grupo Ubago se toma muy en serio el tema de la responsabilidad social y colabora con colectivos vulnerables y asociaciones que los apoyan como ONCE y Fundación Adecco. «Ayer entró un chico con deficiencia del habla que es muy bueno. La responsabilidad social está en la médula de Ubago».
Sobre la docena de personas contratadas, García advierte de que «no se diferencian en nada del resto del colectivo de Ubago. Yo contrato a Laura o Hassan independientemente de su origen». Además, destacó las oportunidades de promoción interna que brinda la empresa y puso como ejemplo a Laura, una de las chicas que hicieron nuestro punto formativo y que trabajando actualmente de operaria se ha presentado a un puesto de calidad.
Otra de las alumnas del punto formativo, que está trabajando como operaria, es una ingeniera industrial venezolana y está pendiente de homologación desde hace ya casi un año.
El alumnado que se formó en la asociación y que están contratadas tiene entre 18 y 40 años y son mujeres en su mayor parte. García cuenta que las mujeres son la gran fuerza de la planta de producción, representando el 80 por ciento de los trabajadores.
La fábrica de Ubago en Málaga tiene a casi un centenar de personas en producción y requerirán más trabajadores: «La idea es renovar la colaboración con Málaga Acoge para 2022 e incluso iniciar proyectos nuevos», asegura García, quien recuerda que «la organización tiene sensibilidad con los colectivos más necesitados y que, al final, ese es el camino».
La misión de los Puntos de Formación (PF) Incorpora e Incorpora Joven es lograr la mejora de la empleabilidad de las personas que se encuentran en riesgo o situación de exclusión social, de modo que puedan incorporarse o volver al mercado laboral.