Alguien llama al teléfono: “¿Tenéis servicio de traducción para poder hablar con una familia china?” La llamada procede de un centro educativo malagueño. Poco después, desde un centro de salud llaman para saber si Málaga Acoge dispone de mediadores interculturales que les puedan ayudar en un caso que han detectado. En ese momento, Liliana, la abogada del departamento Jurídico, atiende en inglés a un usuario; Lucía, de Educación, habla en francés con una familia a la que deben visitar; y uno de los voluntarios de Prisiones, José Antonio, trabaja junto a la técnica del departamento, Carmen, para conseguir los permisos para realizar una charla informativa en el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre sobre extranjería durante el fin de semana. En la sala de espera, alguien pide que le ayuden a obtener una cita con Hacienda con los papeles de la Declaración de la Renta bajo el brazo. De paso, solicita información sobre las clases de español que voluntarios como Matilde, Ana o José Tomás imparten cada semana.
Ninguna mañana es igual en la sede de la calle de Bustamante de Málaga Acoge. Pero lo que se repite cada día son las numerosas acciones, gestos y palabras de ayuda para la gran cantidad de personas inmigrantes que pasan por las diferentes sedes de la entidad. Porque, además de la actividad descrita anteriormente, centrada en la delegación de calle Bustamente en el centro de la capital malagueña, Málaga Acoge tiene instalaciones en calle Ollerías (también en el centro de Málaga), así como en los municipios de Antequera, Fuengirola y Vélez-Málaga, donde trabajan mñana y tarde casi una treintena de técnicos apoyados por más de un centenar de voluntarios. Cuestiones de todo tipo llegan cada día a la entidad, que a veces se ve obligada a derivar a otros colectivos, asociaciones o administraciones porque no siempre las peticiones de ayuda tienen que ver con el colectivo con el que trabaja fundamentalmente la entidad: Los inmigrantes.
La ayuda tiene que ver a veces con actuaciones integradas en grandes programas. Como la orientación laboral y apoyo a las personas inmigrantes para encontrar trabajo con iniciativas que van desde GLOBALemplea hasta el programa EPES de prácticas en empresas. O los temas relacionados con Vivienda y Acogida en alguno de los pisos de los que dispone Málaga Acoge. En otras ocasiones, la ayuda se centra en un acompañamiento para solventar algún papeleo ante alguna administración. A veces, se trata de dar un soplo de aire fresco a los más pequeños, que participan en talleres infantiles donde algunas madres participan como voluntarias junto a varios jóvenes o se preparan para asistir a los campamentos urbanos y las colonias de verano. Y, en multitud de ocasiones, de lo que se trata es de solventar pequeños problemas cotidianos que para algunas personas se convierten en inmensos: No todo el mundo sabe español a la perfección, ni conoce el funcionamiento de las leyes en su totalidad, ni los pasos burocráticos para renovar algún tipo de documentación. Ni tampoco todos tienen los recursos suficientes para vivir con tranquilidad.
Así que cada mañana el teléfono no deja nunca de sonar. Ahora es alguien que llama porque se le va a caducar el permiso de residencia y necesita saber los pasos a realizar para la renovación, algo en lo que le ayudará la abogada de Málaga Acoge, Liliana, o alguno de los voluntarios del departamento Jurídico que ella coordina. Mientras, una chica marroquí espera para saber si alguien le puede traducir un papel oficial. Un rato después, una persona llega con cara de urgencia: Su mujer, de Camerún, se encuentra mal. “¿Podemos llevarla a cualquier hospital? ¿Nos va a costar mucho?”, pregunta el marido. Y el teléfono suena de nuevo: “Querría poder ayudar a Málaga Acoge participando como voluntario. ¿Qué puedo hacer?” El responsable de voluntariado, Lucas, se pondrá en contacto con ella y Antonio Linares se encargará de la entrevista para conocerla en persona y saber en qué podrá ayudar más. Su trabajo, como el de los más de cien voluntarios de la entidad, será básica para que la actividad de Málaga Acoge nunca se detenga.