por Agustín Olías*
¿Cómo están llevando el confinamiento las personas que apoyamos en Málaga Acoge? Para conocer algún caso concreto, hemos hablado por teléfono con Aissata, que vive en un piso de acogida gestionado a través del proyecto Sadhana.
Aissata es una mujer senegalesa, de Dakar, la capital, que llegó a España hace ya diecisiete años. Su primera etapa fue Almería. La segunda, Fuengirola, en Málaga, a donde se trasladó para trabajar en
la hostelería, sector que le atraía.
¿Qué tal estás? ¿Cómo llevas esta situación de aislamiento?
Aquí en casa, aguantando, ¿cómo vamos a estar?, inquietas, preocupadas. Sin poder salir a buscar
trabajo, que es lo que necesito. Pero procuro no pensar mucho, no agobiarme. Me ayuda el hablar
todos los días con el grupo de Málaga Acoge, con María Jesús, con Rosalía… Me llaman todos los días, que
qué tal estoy, que si necesito algo. Me ayudan mucho. También hago cursos en línea, por ejemplo, el de Manipulador de Alimentos. La verdad es que no me aburro. Entre esto que te he dicho y leer, me gusta mucho leer, y ver la tele, se pasa el tiempo.
¿Te ha afectado laboralmente esta situación?
Sí, mucho. Trabajaba en la hostelería, como ayudante de cocina en un restaurante. Pero no estaba fija,
el contrato se acababa en abril. No sé cuando abrirán el restaurante y si me llamarán o no.
¿Qué te impulsó a venir a España?
Fue por mi marido. Él vino a trabajar a Almería y me trajo por reagrupamiento familiar. Eso fue en el
2003. Allí nacieron mis tres hijas, que ahora tienen catorce, trece y once años.
¿Por qué decidiste venir a Málaga?
Mi marido y yo nos divorciamos. Las niñas se quedaron conmigo y aunque él me tiene que pasar una
cantidad mensual de dinero, no lo hace, no se preocupa nada de nosotras. Tuve que buscar trabajo y
pensé que en Málaga podría encontrarlo en la hostelería, que me gusta mucho.
¿Te viniste aquí con las tres niñas?
No. Cuando nuestra situación económica empezó a ser mala, les expliqué que tenían que ir a Senegal,
a vivir en la casa de la abuela, hasta que yo consiguiera trabajo y un sitio para vivir. Hace ya dos años
que se fueron.
Tiene que ser duro para ellas y para ti.
Claro, muy duro. Han nacido en España, han estudiado aquí y hablan español. Yo les decía que esta
separación era solo una pausa hasta que yo me buscase medios para vivir juntas. Estoy tranquila
porque ellas saben lo que quieren, aunque a su edad son un poco rebeldes.
¿Piensas que en un futuro podrán regresar a España?
Mi intención era traerlas en agosto, pero con esta situación que tenemos no sé si lo podré hacer. Ellas
quieren volver, están ilusionadas con eso. Cuando vuelvan estoy segura que se adaptarán bien, pues
han estudiado aquí, y en Senegal siguen estudiando. Ahora mismo estamos en trámites para que obtengan la nacionalidad española.
¿Cómo conociste Málaga Acoge?
Cuando llegué a Málaga y empecé a trabajar, un trabajo que me gustaba, pude alquilar un dormitorio.
Pero después de algunos meses me quedé sin trabajo. El tiempo pasaba, no encontré empleo y empecé
a deber el dinero de la habitación. Solicité ayuda, pero no conseguí nada. Yo solo pensaba en encontrar
trabajo. Una vecina me dijo que fuese al Ayuntamiento, a Cruz Roja y a Málaga Acoge. Fui a todos los
sitios. En Málaga Acoge me atendieron muy bien y además de ayudarme en la búsqueda de trabajo me
incluyeron en el proyecto del piso de acogida. Menos mal, porque ya se me había acabado el dinero
para pagar la habitación. Llevo seis meses en el piso.
En el piso de acogida gestionado por Málaga Acoge actualmente viven dos familias. ¿Qué tal es
la convivencia?
En el piso hay reglas que hay que cumplir, y eso ayuda en la convivencia; cada una sabe lo que hay
que hacer y lo que no se debe hacer, los horarios que hay que cumplir. Ella es marroquí y vive con sus
dos hijos. Nos llevamos bien, aunque a veces surge algún problema que resolver.
A pesar de “todo lo que está cayendo”, te siento con fuerza, positiva.
Hay que seguir adelante. Te ayudan pero tienes que moverte y buscar trabajo, para poder pagar el
alojamiento. Aquí tienes la comida y los gastos del piso pagados, pero yo necesito un piso para vivir
con mis hijas cuando vuelvan a España. Hay que tener voluntad de trabajar. Yo voy a todas las ofertas
de trabajo que me proporciona Málaga Acoge. Hay que tener una actitud positiva. Si te dan posibilidades, tienes que aprovecharlas. Málaga Acoge te ayuda todo lo que puede en lo que una necesita, pero tienes que poner de tu parte para salir adelante.
Agradezco muchísimo a Aissata la gentileza que ha tenido al dedicarnos estos minutos y contarnos
su experiencia. Le deseo toda la suerte del mundo y que pronto pueda traer a sus hijas a Fuengirola.
Málaga Acoge, dentro de sus posibilidades, estará siempre ayudándola.
Málaga Acoge desarrolla el proyecto «Sadhana. Piso de acogida para mujeres en situación de exclusión residencial en Mijas (Málaga)» con el apoyo del Ayuntamiento de Mijas en el marco del programa «Sadhana. Gestión integral de la inclusión socio-sanitaria, económica y laboral de personas sin hogar desde la acogida en viviendas con plazas temporales”. Se trata de un programa de la federación Andalucía Acoge, subvencionado por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del IRPF.
Durante este periodo de emergencia seguimos apoyando a las personas y familias que lo necesitan por vía telefónica en Antequera, Málaga, Fuengirola y Torre del Mar.
Ayúdanos a apoyar a las personas más vulnerables que lo están pasando mal en esta crisis. Con tu colaboración contribuirás a mejorar la situación de muchas familias que atendemos en Málaga Acoge. Dona AQUÍ.
Agustín Olías es secretario de la Junta Directiva de Málaga y voluntario en el área de Comunicación.
La imagen que acompaña la entrevista es una obra de Paula Vicenti, artista participante en nuestro proyecto Artistas Acoge.