por Agustín Olías*
Son las nueve de la mañana, estoy en la sede de Málaga Acoge en Antequera donde, en media hora, comenzará una nueva sesión de la formación de dinamizadoras comunitarias en prevención de violencias machistas. Nadia, una mujer que apoyamos y alumna de este curso, ha sido tan amable de llegar media hora antes y brindarme la oportunidad de entrevistarla. ¡Muchas gracias!
Me llamo Nadia, soy marroquí, nací en un pueblo del norte del país, entre Melilla y Argelia. En un momento de mi vida pasé a Melilla. Allí conocí a mi futuro marido, con quien me casé y tuve una hija. Luego vinimos a Antequera. Eso fue en el 2021. Pero el año pasado nos separamos.
¿Qué tal estás aquí, en Antequera?
Bien. Me he acostumbrado bien, por ejemplo, con el clima; hace tanto frío como en la tierra donde nací.
¿Cómo conociste Málaga Acoge?
A través de una amiga. Ella vino aquí a ver si la podían ayudar a buscar trabajo, pero un trabajo bueno, con papeles en regla. De eso hace ya casi dos años.
¿Qué te parece lo que Málaga Acoge te está ofreciendo?
Me ayuda mucho, mucho. A buscar trabajo, para arreglar mis papeles, porque habían caducado; yo tenía los papeles bien en Melilla, pero no podía ir, porque tengo la tarjeta caducada. Como estaba casada y divorciada tengo que cambiar mi tarjeta. Hubo algún problema pero Ana Dori (abogada de nuestro equipo jurídico) lo solucionó. También me apoyan en la búsquedad de trabajo y Nuria (abogada del Centro de Información de la Mujer) me ayuda a buscar casa de alquiler.
El mes pasado Nadia hizo un curso de atención domiciliaria a personas mayores. Está convencida de que estos cursos la van a ayudar a encontrar trabajo en cuanto se ponga a buscarlo. ¿Cómo ves tu futuro y el de tu familia?
Ahora no estoy bien, pero estoy luchando para estar mejor. El año pasado trabajé como ama de casa y así, poco a poco, voy saliendo adelante. No sé cómo será el futuro, pero lo que sí estoy segura es de que no voy a cambiarme de país, podré cambiar de ciudad si es nececsario, pero no de país.
Me habla, orgullosa, de sus hijos.
Ahora tengo un hijo y una hija. La niña tiene ya siete años y está en el colegio. Está muy contenta, está viviendo con su padre, la custodia se la concedieron a él.
A Nadia le preocupa especialmente su hijo, quince años, que vive con ella, pues el año que viene cumplirá dieciseis años y no podrá seguir en el internado.
Lleva aquí dos años y lo primero que tuvo que hacer fue aprender español. Ahora lo habla mucho mejor que yo; a veces no entiendo alguna palabra en español y le pregunto a él, y él la sabe. Está interno en un colegio de Salesianos estudiando tercero de ESO. Está muy bien allí, los fines de semana viene a vivir conmigo. No sabemos qué hará cuando termine. Creo que no quiere seguir estudiando, que prefiere trabajar. Yo le digo que aquí no es como en Marruecos, que si no termina la ESO es como si no tuviese nada.
Nadia tiene que irse al curso y debemos finalizar esta entrevista y le pido que se despida:
Yo casi todos los días vengo a Málaga Acoge. Vengo a un curso de español; me ayudan a rellenar los papeles que necesito para muchas cosas, me explican temas que tengo que saber para encontrar trabajo…., les estoy muy agradecida.
El apoyo jurídico se enmarca en nuestro proyecto Apoyo Jurídico en Materia de Extranjería a personas Inmigrantes en la provincia de Málaga que realizamos con el apoyo de la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad.
*Agustín Olías es voluntario de Comunicación de Málaga Acoge.