Por Agustín Olías*
Esta pandemia nos ha cambiado la vida. ¡Vaya obviedad!, pensaréis con razón. Pero dejadme que continúe: a unos más que a otros y a algunos les ha puesto muy al filo de la navaja. De esto trata la entrevista de hoy.
Noelia es una joven malagueña, solo veintinueve años, casada y madre de dos niñas y un niño. Hasta hace más o menos un año vivía….., no voy a decir “bien”, digamos que vivía “al día”. Pero con la pandemia la vida le dio un vuelco total.
Soy malagueña, he vivido toda mi vida aquí, en la ciudad de Málaga. Estoy casada y tenemos tres hijos, la mayor cumplirá a final de mes diez años, la mediana tiene cinco y el chiquitín año y medio. Como ves estoy muy entretenida, aunque las dos niñas van al colegio. Estuve trabajando hasta con la segunda, pero ahora, con el “peque” estoy parada. Busco empleo, pero imagínate, tal como están las cosas es imposible.
¿Cómo era vuestra vida antes de la pandemia?
Mi marido trabajaba en una pizzería y hacía trabajillos de pintura que le salían de vez en cuando. Íbamos al día. Pero desde que le despidieron el 13 de marzo del año pasado, la cosa fue muy mal. Cobró el desempleo durante dos meses y luego, nada. Yo estoy trabajando un día a la semana en una casa, planchando, son tres horillas. Con eso y con los trabajillos que consigue encontrar mi marido vamos tirando malamente.
¿Cómo conociste a Málaga Acoge?
Yo estoy en Cáritas y ellos enviaron una solicitud a Málaga Acoge y me llamaron. Nos conocimos y desde entonces Málaga Acoge nos está ayudando mucho.
¿Por ejemplo?
Por ejemplo con el alquiler. Llevábamos varios meses pagando lo que podíamos, pero nunca era suficiente, 100 o 200 euros usando el desempleo de mi marido. Además, nos han conseguido el cheque infantil del peque, que sirve para comprar comida y artículos para la higiene.
Noelia me cuenta que está esperanzada en que Eva (técnica de Málaga Acoge que trabaja con la familia) consiga una plaza para su hija mayor en el grupo de refuerzo escolar que gestiona Málaga Acoge (dentro del proyecto Caixaproinfancia).
La mayor está en 4º de primaria y ahí ya aprietan mucho con los exámenes. Además, la mitad de las asignaturas son en inglés y también tienen francés. Espero que quede alguna plaza libre y mi niña pueda ir a las clases de refuerzo. Yo la ayudo lo que puedo, pero no es lo mismo. Seguro que ella estará más atenta si está con una profesora, no conmigo, que no presta tanta atención. Además la han metido en el club “Inspiri”. Es un cursillo sobre ordenadores, diseño gráfico, diseño de aplicaciones y cosas así.
En este momento, ¿qué es lo que más te preocupa?
Lo que tengo siempre pendiente, es el tema del alquiler, todavía debemos bastantes meses. No debemos el cien por cien, porque como te he dicho antes hemos ido pagando lo que hemos podido, 100 , 200 euros, dependiendo de lo que tuviésemos. Con este tema estamos “cojeando”. Todavía debemos una cantidad muy alta.
Me imagino que habitualmente mantienes contacto con Eva, tu técnica de Málaga Acoge.
Sí, tenemos contacto. Por ejemplo ayer me llamó porque hay una obra de teatro por la carretera de Cádiz, y me ha apuntado para que vaya con las niñas. Sí, ella me avisa de cualquier cosilla que vaya saliendo. Para las niñas esto está genial. Salimos de casa, ellas se entretienen, les viene muy bien hacer algo diferente al día a día.
Para finalizar, Noelia, ¿cómo ves el futuro?
¡¡¡Uffff!!!, mal, con está “cosa” que tenemos, no sé cómo será el futuro. Lo veo mal, pero no pierdo la esperanza. Confío en que mi marido pueda encontrar trabajo, porque yo lo tengo mal con los críos. Si a él le volviesen a contratar y luego le saliesen algunas chapucillas, creo que podríamos apañarnos y salir adelante. Yo sé que no somos la única familia que está en esta situación, que hay muchas familias que están peor, que no tienen nada de nada, ningún ingreso, pero nosotros, gracias a Dios, podemos comer todos los días, que es lo más importante y si pudiésemos pagar las cosillas básicas, ya estaría bien.
Las hijas e hijo de Noelia están incluidas en el programa Caixaproinfancia, impulsado por Fundación «la Caixa», cuyo objetivo es romper el círculo de la pobreza que se transmite de padres a hijos y ofrecer a los más pequeños oportunidades de futuro. De ahí la ayuda para alimentación e higiene y la posibilidad de recibir clases de refuerzo escolar. Adicionalmente, al margen del programa Caixaproinfancia, Málaga Acoge le ha apoyado puntualmente para el mantenimiento del alquiler del piso y el equipo de Empleo de la entidad están orientándoles en la búsqueda de trabajo.
Agradezco muchísimo a Noelia que haya compartido con nosotras sus preocupaciones y esperanzas y le deseo lo mejor para el futuro.
*Agustín Olías es voluntario del Área de Comunicación y miembro de la Junta Directiva de la entidad.
La imagen que acompaña el texto es de Betty Bundi, creador de nuestro proyecto Artistas Acoge.