Por Claire Conrad
Elena Martín Hernández es voluntaria en el Área de Administración. Elena, de 26 años y licenciada en Administración y Dirección de Empresas, nos cuenta sobre su experiencia en Málaga Acoge.
Cuéntanos un poco sobre ti.
Soy malagueña, licenciada en Administración y Dirección de Empresas y, actualmente, en paro. Estudié en la Universidad de Málaga y después de terminar me encontré como estamos todos los jóvenes: sin trabajo, con ganas de hacer cosas pero sin posibilidades de más. En principio empecé a estudiar idiomas. Estudié inglés y, una vez que he conseguido el objetivo que me marqué, pues me encontré con ¿Ahora qué? En fin, me encontré con que tampoco tenía nada más que hacer.
¿Cómo decidiste empezar el voluntariado?
Me habían comentado la opción de ser de voluntaria y busqué por internet que podría hacer. Vi la página de voluntariado de Málaga Acoge, todas las fotos que hay, y me llamó bastante la atención. Escribí un correo y a los pocos días ya me contestaron que si venía a hacer la entrevista.
¿Por qué optaste por el Área de Administración?
En principio me llamaba más la atención el tema de administración por lo que he estudiado. ¡Pero la verdad es que no sabía que se podía ser voluntaria ahí! No lo supe hasta que vine a Málaga Acoge y comenté que no sabía si, quizás, realizar apoyo escolar por las tardes o participar en el Área de Voluntariado echando una mano. Pero cuando dije lo que había estudiado me dijeron: «¿Por qué no ayudas en el Área de Administración?» Al mes me llamó mi actual compañera, Carmen, del Área de Administración, y cuando llegué empezó a hablarme de las cosas que íbamos a hacer. Me está ayudando mucho y estoy aprendiendo un montón.
¿Qué estás aprendiendo en tu voluntariado?
Es como las prácticas que no pude hacer en la carrera. Estuve buscando prácticas mientras estaba en la carrera y no hubo manera. Todos queríamos prácticas y salieron pocas y no había para todos. No tuve la suerte. He hecho una asignatura más para cubrir estos créditos y ahora estoy haciendo las prácticas que no pude hacer. El primer día llegué aquí me enseñó un poco de contabilidad, que ya habíamos visto en la carrera pero no es lo mismo la teoría que la práctica. Me llega de todo: desde facturas, por ejemplo, y me han enseñado a contabilizar las nóminas de los trabajadores. Ya voy cogiendo el truco, al principio fue un poco difícil, me veía liada entre tantos números, no lo había visto en mi vida. Ahora estamos con ayudas económicas, y también me he encargado de enviar información fiscal a las personas que han colaborado con nosotros económicamente.
Descríbenos un día normal.
Normalmente vengo los martes, pero es flexible. Llego por la mañana, saludo a los compañeros y pregunto por las tareas del día. ¿Qué es lo que vamos a hacer hoy? Planifico un poco mi día y empiezo. Me esperaba ver gente, pero no tanta. Hay muchos trabajadores y muchos voluntarios. Lo bueno es que se interesan en qué es lo que yo quiero hacer, no es que me den el trabajo que lo les apetece hacer. En Málaga Acoge cuentan conmigo y me siento como si fuera una trabajadora más aquí totalmente. No siento distinción entre voluntarios y trabajadores para nada, que es una cosa muy positiva.
¿Cómo te ayuda esta experiencia como voluntaria?
El voluntariado es súper positivo. No de cara sólo a la gente de a pie si no a cualquier persona que pueda contratarte. Creo que el trabajo que estás haciendo, sin esperar nada a cambio, no es solo que estés ayudando, sino que también te estás formando tú realmente. Lo utilizaré también en mi currículum como un trabajo más.
En muchos departamentos hay mucho contacto con usuarios. ¿Cómo es desempeñar un papel menos visible?
No es lo mismo, me imagino, el trabajo que yo hago que el que se hace en los departamentos que son más de cara al público, donde hay mucha relación con los usuarios. A lo mejor tenemos más contacto con los otros trabajadores. Hay un trabajo detrás que no se ve pero es igual de importante. Todas las partes son importantes. Animo, además, a todo el mundo a realizar un voluntariado. Hay cosas que hacer, hay para elegir cualquier ramo que puedas imaginar. Siempre hay hueco y labores para colaborar.
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