Actualizado hace 9 años – Publicado el 27 de octubre de 2014
A Elena le brillan los ojos cuando habla de sus hijos. “Hoy la niña me ha respondido por primera vez en castellano”, afirma con una sonrisa inmensa mientras relata lo importante que ha sido ver a su hija jugar con sus compañeros en la guardería. La pequeña tiene poco más de dos años y apenas lleva un mes en el centro educativo. Hasta entonces, el coste de una guardería –cercano a los 300 euros mensuales- era algo inalcanzable para Elena. Sin trabajo, y con otro hijo a su cargo de cuatro años y escolarizado en un centro de la capital, le era imposible pagar la cuota. Su situación administrativa irregular “lo complica todo mucho más”, subraya Rocío Blancas, trabajadora social de Málaga Acoge.
Elena llegó hace nueve años a España desde Rusia. Trabajaba de esteticista en su país natal pero la inestabilidad económica y laboral le llevó a emigrar a finales de 2005 a Sevilla, donde vivía su pareja. Tras un tiempo trabajando de manera inestable como empleada de hogar, en 2007 se mudó a Málaga, donde continuó trabajando en el servicio doméstico y también en algunas peluquerías. Sin embargo, sus circunstancias y el contexto económico hacían cada vez más difícil la búsqueda de un empleo. “Y, cuando lo conseguía, a veces no me pagaban o se aprovechaban de la circunstancias por no tener mi documentación”, relata Elena. En situación de vulnerabilidad y sin posibilidades de buscar trabajo al tener que cuidar de su hija, la mujer tuvo incluso que rechazar alguna oferta de trabajo que podría haber servido para regularizar su situación. “No podía dejar a mi pequeña todos los días en casa de alguna amiga. Un día o dos o tres, sí; pero siempre es demasiado”, explica. Y aunque había pedido la bonificación de la guardería por su situación familiar hasta seis veces, siempre le había sido denegada. Aunque sus circunstancias socioeconómicas permitían acceder a la bonificación de manera directa, no disponer de un NIE suponía la única barrera para recibirla.
El pasado mes de mayo, Elena llegó a Málaga Acoge buscando desesperada una salida. Un camino que le permitiera empezar a salir adelante con su familia. Por un lado, tanto el Área de Empleo como el Departamento Jurídico se pusieron manos a la obra para ayudar en la búsqueda de empleo y orientarle sobre la manera de regularizar su situación. Y, por otro, desde el Área Social. En este caso, el punto de partida fue empezar a trabajar de manera conjunta con el Área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Málaga para encontrar una solución, una labor que se ha desarrollado durante los meses de verano. Además, la familia ha pasado a formar parte del programa CaixaProinfancia.
Finalmente, el trabajo entre Málaga Acoge y los técnicos municipales dio sus resultados: hace un mes que Elena recibió el acceso bonificado a la guardería para su pequeña. Un hecho que ha sido de vital importancia para la familia. “Esa ayuda significa mucho. Es un aspecto imprescindible para la integración social y laboral de Elena, quien antes tenía imposible conciliar la vida laboral y familiar”, destaca Rocío Blancas, trabajadora social de Málaga Acoge. Elena lo refrenda: “Ahora sí que puedo buscar trabajo y, también, conseguir mi documentación. Es muy importante para nuestra familia”, asegura la mujer, que dispone de todos los requisitos para poder regularizar su situación salvo la oferta de trabajo. “Lo importante es que ya he tenido alguna propuesta y la cosa no ha terminado de cuajar… Pero confío en que pronto sí lo haga”, destaca muy positiva.
La situación de Elena no es única. Son muchas las personas que viven los mismos problemas y que no pueden afrontar los gastos de la guardería para sus hijos. “Son casos que se repiten una y otra vez”, cuenta Rocío Blancas. Además, al igual que Elena, la situación de estas personas suele estar marcada por la ausencia de una red social de apoyo, la escasez de recursos económicos y la situación administrativa irregular, “con lo que ello supone, porque te limita para todo”, subraya la trabajadora social. Al menos, Elena cuenta ahora con una oportunidad para encontrar empleo y conseguir obtener su documentación y conseguir estabilidad tanto para ella como para su familia.