Actualizado hace 9 años – Publicado el 30 de enero de 2015
Gabriel Ruiz, José Luis Rodríguez Candela y Luis Pernía han reflexionado sobre la situación de la inmigración pasada, actual y futura ante más de medio centenar de personas.
Málaga Acoge ha celebrado esta tarde la mesa redonda 25 años de inmigración con la presencia de algo más de medio centenar de personas. Un acto en el que, con motivo del 25 aniversario de la organización, se repasaron algunos de los acontecimientos más importantes en este tiempo para afrontar los retos del presente y del futuro. También se trataron diversas cuestiones de actualidad como las devoluciones en caliente y su inclusión en la nueva Ley de Seguridad Ciudadana e, igualmente, hubo palabras para las personas desaparecidas durante la pasada madrugada que viajaban en una patera en el estrecho de Gibraltar. Además, el acto se aprovechó para nombrar a Gabriel Ruiz como socio de honor de Málaga Acoge.
En la actividad participaron José Luis Rodríguez Candela, coordinador del equipo jurídico de Andalucía Acoge y abogado voluntario de Málaga Acoge; Luis Pernía, presidente de la Plataforma en solidaridad con las personas inmigrantes en Málaga; y Gabriel Ruiz, responsable de Médicos del Mundo en Málaga. El acto, además, estuvo presentado por la presidenta de Málaga Acoge, Adela Jiménez, quien repasó brevemente el origen de Málaga Acoge y los motivos de creación hace ya 25 años y contó con la presencia de representantes de otras organizaciones sociales de la capital malagueña, así como personas que han formado parte de Málaga Acoge en sus dos décadas y media de historia.
En su intervención, José Luis Rodríguez Candela recordó algunos de los momentos más significativos en los últimos años en Málaga, como el encierro de personas inmigrantes en la Catedral de Málaga, las expulsiones de personas inmigrantes sedadas con haloperidol, los incendios o muertes en el ya cerrado Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Capuchinos (cuyas dos décadas de historia están recogidas en la página CIE de Málaga: Nunca más) además de los presuntos abusos sexuales a internas por parte de varios policías, proceso que actualmente se está juzgando. “Hay que entender que no podemos tener personas que no han cometido delito en peores condiciones que personas privadas de libertad que han cometido delito”, explicó Rodríguez Candela. En ese sentido, se refirió a las últimas novedades del Reglamento de estos centros, del que el Tribunal Supremo ha anulado cuatro apartados tras la denuncia realizada por Andalucía Acoge junto a APDHA y SOS Racismo. Rodríguez Candela también destacó situaciones como la de los jóvenes ex tutelados, “que a los 18 años se dejan en la calle y la administración se desentiende totalmente de ellos, lo que es de una hipocresía alucinante”.
Por su parte, Gabriel Ruiz, una de las personas que comenzó en los primeros pasos de Málaga Acoge, recordó sus inicios en la entidad y tuvo también palabras para organizaciones como CEAR Málaga, Médicos del Mundo –de la que es coordinador en Málaga actualmente- o Al Quds. De la misma manera, sus palabras sirvieron para reflexionar sobre cómo muchos de los problemas de hace 25 años siguen estando hoy vigentes, entre otros aspectos porque “la inmigración nunca ha estado en la agenda política de nadie” y por eso «queda mucho trabajo por hacer». “Pero también debemos reconocer que en este tiempo se han logrado algunas pequeñas victorias”, aseguró Ruiz. Una de ellas, “quizás una de las más destacadas”, fue la consecución del cierre del Centro de Internamiento de Extranjeros malagueño. “Un proceso que costó mucho trabajo, que fue muy largo y que se consiguió por el esfuerzo de muchas personas”, recordó Ruiz. “Esto no son luchas de un día o dos, son mucho más complicadas”, explicó. Aunque también tuvo palabras para la reforma sanitaria, “un lamentable decreto arrancó de cuajo el acceso universal a la salud”. Y cómo el hecho de que en Andalucía sí se siga atendiendo a personas inmigrantes en situación administrativa irregular en los servicios de salud, “algo que se logró por la denuncia y lucha continúa de las organizaciones, cuando recurríamos a los medios de comunicación, cuando se hizo presión”. Y tuvo también palabras para campañas como Stop Rumores, “que sirven para recordarnos muchos de los contextos en los que hay aún mucho por trabajar y los rumores que tanto daño hacen a la convivencia”.
Por último, el presidente de la Plataforma de solidaridad con las personas inmigrantes, Luis Pernía -también responsable en Málaga de la Asociación Andaluza por la Paz y la Solidaridad (ASPA)- recordó cómo llegó a Málaga en el año 1975 y cómo, desde ese momento, empezó a conocer los aspectos relacionados a la inmigración. “Me gustaría poner en valor el contenido humano de la experiencia de los últimos años trabajando por la inmigración”, destacó Pernía, que quiso ir más allá de los datos y las consecuciones para resaltar que la migración en este tiempo “nos ha dado claridad para ser honestos, también decisión y compromiso, madurez, capacidad para luchar contra nuestros miedos. Y también nos ha dado paz”. Para Pernía, el resumen de los 25 años es el de una historia, “la de las migraciones”, pero no sólo las de ahora, si no las de toda la historia de este planeta. “Esa pintada que hemos hecho muchas veces en las paredes en la calle de ‘Todos somos inmigrantes’ no ha sido entendía”, subrayó el máximo responsable de la Plataforma de solidaridad con las personas inmigrantes. Finalmente, reflexionó sobre los obstáculos constantes que tienen las personas inmigrantes, pero también destacó que actos como el de la mesa redonda celebrada en Málaga Acoge sirven para seguir luchando, para seguir con la misma filosofía y “cada vez con más fuerzas”.
Artículo: CIE de Málaga: La impunidad como norma
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